Las Arenas de Arlés

Tras visitar el puente del diablo no dirigimos havia aviñon haciendo pasandonos por el camino por la ciudad de Arles, tras aparcar nos acercamos a ver el monumento romano de las Arenas de Arlés


Las Arenas de Arlés es un anfiteatro romano calificado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Los ingenieros romanos construyeron el anfiteatro de Arlés sobre la colina del barrio arlesiano «L'Hauture».

Fue construido poco después de construirse Coliseo de Roma, del que que toma las principales características. Incluye un sistema de evacuación por numerosos pasillos de acceso vomitorios, una escena central de forma elíptica rodeada con gradas, con los soportales, sobre dos niveles,
Este «templo» del juego donde se enfrentaban los gladiadores sigue funcionando hasta el final del Imperio romano.
En 255, el emperador Gallo hace celebrar con juegos las victorias de sus ejércitos contra los galos. A principios del siglo IV, Constantino I hace representar grandes cazas y combates con motivo del nacimiento de su hijo mayor.

Los documentos históricos ponen de manifiesto que se utiliza aún bajo el episcopado de Cesario después del paso de la ciudad a soberanía franca,A finales del siglo VI se fue fransformado en bastida, especie de fortaleza urbana que al hilo de los tiempos se dota de cuatro torres y en la cual se integraron más de 200 viviendas y dos capillas.

Las arenas se volvieron a encontrar en una fiesta inaugural con motivo de la celebración de la toma de Argel, el lado festivo y dramático inicial para el cual se construyeron, como una clase de perpetuación de las costumbres romanas, con el espectáculo taurino lo que le vale el nombre actual de «Arenas».

Se las califica como «monumento histórico de Francia» a iniciativa del escritor Próspero Mérimée. Este edificio acoge hoy numerosos espectáculos, en particular corridas de toros, además de teatro y espectáculos musicales, una manera de combinar la conservación del patrimonio antiguo y la vida cultural de hoy.

Como ya era tarde no pudimos visitar el monumento por dentro pero pudimos verlo desde fuera y si que se daba una aire al coliseo romano.

Tras esto seguimos dando una vuelta por la ciudad de arles antes de seguir camino hacia Aviñón.