miércoles, 14 de julio de 2010

Ultimo dia en Guilin 06/10/2007

Este fuel e primer día que nos desmarcamos de las vistas organizadas del viaje las cuales eran una pasta y teníamos otros planes( lo que no le gusto nada a la guía acompañante pero son lentejas), quedamos con el resto del grupo en la puerta del hotel a la 13:30 para ir a comer a uno de los restaurantes concertados.

El resto del grupo hizo una visita a un poblado cercano para ver algo de la artesanía local(básicamente un abuelete pintando lienzos con la mano y unas cuantas casas típicas) y una calle donde comprar chuminadas.

Nosotros por nuestra cuenta nos levantamos cuando nos apeteció, bajamos a desayunar tranquilamente, después subimos a darnos un duchazo y ala a patear Guilin. Nos fuimos a ver la ribera del rio que iba bastante bajo y olía de pena.

Vimos un atracadero de barquitas de bambú. Que con el rio con algo más de agua debía de ser un buen reclamo para los turistas.

Tras el paseo por la rivera del rio fuimos visitar Fuboshan o colina del remolino, lleva el nombre de un famoso general chino.
Se eleva en el centro de la ciudad, ofreciendo una espectacular vista desde su cima. Con una altura de 213 metros y emerge 62 metros por encima del agua. La mitad de ella está en el río y la otra mitad de ella en tierra. Puesto que el agua siempre está agitada y es bloqueada por la colina, se la considera que tiene el poder de someter a las olas.
Por otra parte, esta colina fue un templo en conmemoración del general Fubo que se construyo en la dinastía Tang, que dio origen al nombre Fubo Hill.
Paisaje natural de rocas y estalactitas, así como el claustro artificial y pabellones componen una visita fantástica y única de la colina.
A los pies se encuentran la Cueva de la devolución de la Perla, la Cueva de los Mil Budas y el test de la espada rocosa. Un hermoso claustro y un salón de té fueron construidos en la ladera sur. A medio camino está el Pabellón Tingtao.

Frente al jardín se encuentra un pabellón que cuenta con una campana de hierro de 300 años de edad que pesa 2500 kg. Se dice que en su interior se puede hervir suficiente comida para un millar de personas.


Las escaleras conducen a la plataforma de observación que es un lugar ideal para disfrutar del panorama de Guilin.

Dentro el test de la espada de Roca, es un pilar de piedra enorme que cuelga del techo. Visto de lejos, parecer un pilar del techo hundiéndose en la superficie del agua. Si se mira más cercana sorprendentemente cuelga a una distancia de 1 cun por encima del agua y parece estar cortado por la espada afilada.
La leyenda dice que el General Fubo probado su espada en la roca, que le dio su forma actual. Y Cuando el general fue a negociar con los delincuentes en la Cueva de y llegado a un callejón sin salida, sacó la espada e hizo un corte en el enorme pilar. Sus opositores se asustaron y se retiraron inmediatamente.
"¿Hasta dónde quieren que nos vallamos? , le preguntaron.
«Ir a donde mi flecha caiga. El general respondió.
"Ok, de acuerdo. Veamos hasta dónde puede volar."
General Fubo se subió a la colina Fubo y disparó su flecha, que voló una distancia de tres colinas, hasta que aterrizó en el campo de donde los delincuentes habían llegado inicialmente. Los delincuentes se retiraron según lo acordado.

Al entrar en la cueva se tienen la oportunidad de apreciar el encanto de la roca, las estalactitas y las estatuas del interior. La mayoría de las estatuas fueron talladas a finales de la Dinastía Tang. Hay muchas leyendas sobre la cueva, una cuenta que un campesino tomó una perla resplandeciente de la gran cueva y enfureció al Rey Dragón. Los vecinos del campesino le aconsejaron que devolviera la perla y así lo hizo. Así, el Rey Dragón dejó hacer subir las olas diablo, y va vida de los campesinos volvió a ser pacífica.

La Cueva de Mil Budas se encuentra escondida en la colina. Dispone de tres niveles con una superficie total de 133 metros cuadrados (159 metros cuadrados). Se sube a lo largo de la escalera de caracol y se ven los 239 estatuas de Buda, 36 consagradas a la última dinastía Tang en el nivel superior, junto con pinturas murales de la dinastía Song.



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